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Los muelles de carga son el área logística en la que tiene lugar la carga y descarga de mercancía, es decir, el nexo de unión entre el vehículo que transporta la mercancía y el almacén. Por lo tanto, son un punto clave en la logística y juegan un papel esencial en el buen funcionamiento de esta.

Muelles de carga: tipos y componentes

Existen diferentes tipos de muelles de carga en función de las características del almacén:

• Muelles estándar: se trata del tipo de muelle más utilizado, ya que ahorra espacio al no sobresalir del edificio. Consiste en una abertura en la fachada del almacén  situada a la misma altura que el camión. Esta cuenta con un amortiguador en el punto de entrada para que el remolque no sufra daños al acercarse. La parte trasera del camión queda a ras de la abertura del edificio, lo que facilita la carga y descarga de la mercancía. Además, este tipo de muelles ofrecen bastante protección al personal responsable de la operativa porque permanecen en todo momento dentro del edificio. 
• Muelles de diente de sierra: es un tipo de muelle en el que los camiones se aproximan en ángulo al almacén, con lo que se mejora la capacidad de maniobra y se ahorra espacio fuera del almacén. Estos muelles de carga son útiles cuando es necesario acomodar varios vehículos pero el espacio es limitado, además se complica el movimiento interior de mercancías y el almacenamiento del producto.
• Muelles abiertos: son muelles que se encuentran al aire libre, por lo que la climatología es un factor que afecta en las operaciones de carga y descarga a la hora de ejecutar las operaciones de carga y descarga. Brindan mucha flexibilidad, por eso se emplean en almacenes que trabajan con una gran variedad de transportes. Sin embargo están muy expuestos a daños y robos, por eso cada vez se utilizan menos.
• Muelles cerrados: en estos muelles el vehículo de transporte se introduce completamente en el interior del almacén y es ahí donde se realiza la carga y descarga de mercancías. Este factor permite proporcionar unas determinadas condiciones para la manipulación de la mercancía (temperatura, humedad…), por eso se emplea bastante cuando se trata de materiales peligrosos o de alto valor.

Cada empresa decide qué tipo de muelle de carga utilizar en función de diversos factores como el espacio disponible, el tipo de vehículos que se van a utilizar para la carga y descarga, el tipo de mercancía que se va a almacenar, etc. 

Sin embargo, sea el muelle que sea, siempre hay una serie de elementos comunes a todos ellos que sirven para facilitar la carga y descarga de las mercancías, así como para garantizar la seguridad de los trabajadores:

• Topes o cuñas: son elementos de seguridad para evitar que los vehículos se muevan durante la carga y descarga. Suelen estar ubicados en el pavimento y mantienen el remolque en su sitio mientras los operarios trabajan.
• Niveladores: sirven para salvar la distancia entre el muelle y el remolque. Disponen de un mecanismo mecánico o hidráulico que despliega una plataforma ajustable en altura para acceder al remolque, facilitando una superficie nivelada para llevar a cabo las operaciones de carga y descarga.
• Sellos o abrigos: se trata de unos elementos que se colocan alrededor de la puerta del muelle de carga y protegen frente a la entrada de aire, polvo o suciedad, inclemencias atmosféricas, etc. Se pueden distinguir sellos de diferentes tipos como los retráctiles, los fijos, los hinchables, etc.
• Sistemas de iluminación: son un componente fundamental para que los operarios puedan realizar correctamente su trabajo. Tener una iluminación adecuada tanto en la zona de carga como en el interior evita problemas y accidentes.
• Sistemas de restricción: pueden ser cadenas, ganchos o correas que se ubican en la base del muelle y sirven para asegurar el vehículo y mantenerlo estable durante las operaciones de carga y descarga.

Lectura recomendada: Aspectos a tener en cuenta en el transporte de mercancías por carretera

Cómo optimizar un muelle de carga

Muchas empresas a la hora de planificar sus muelles de carga pasan por alto algunos factores que después son esenciales durante las operaciones logísticas. Es importante tener en cuenta los siguientes aspectos si se desea conseguir un correcto funcionamiento de los muelles de carga:

1. Pensar en el futuro al diseñar los muelles: siempre hay que tener en mente cómo va a ser el futuro de la compañía, si se espera que esta crezca y se expanda, entonces se deben diseñar los muelles de carga pensando en ello, en que a futuro hará falta más espacio para ampliar las instalaciones y respetar las estructuras iniciales.
2. Facilitar nuevas necesidades logísticas: pueden haber cambios en los métodos de almacenaje o incrementos de actividad en la empresa, lo que va a derivar en nuevas necesidades que los muelles de carga deben estar adaptados para asumir.
3. Tener en consideración el horario de los transportistas: es muy importante disponer de una buena planificación horaria para no sufrir cuellos de botella en horas puntas. Para esto, la mejor solución es contar con un software de gestión de transporte que permita que los transportistas reserven la hora de carga disponible, ya que el cargador puede compartir las ventanas horarias disponibles de los muelles de carga.
4. Disponer de espacio para mercancía rechazada: si llega mercancía defectuosa o que por algún motivo debe ser devuelta, es recomendable disponer en el muelle de carga del almacén de un espacio habilitado para almacenar ese tipo de carga para que no estorbe hasta que sea retirada.

Evita los cuellos de botella con un software de gestión de transporte

Muchas empresas cargadoras están optando por automatizar procesos que tradicionalmente siempre se han realizado de manera manual. Uno de estos procesos es la gestión de los muelles de carga, ya que existen soluciones en el mercado, como los TMS o sistemas de gestión de transporte, que detectan posibles cuellos de botella en las entradas, para así evitarlos y optimizar estos procesos.

Alquenos de los principales desafíos que se encuentran las empresas en la gestión de los muelles de carga son:

• Información incompleta, imprecisa o no actualizada que impide saber la hora exacta en la que llegará en el transporte. 
• No existe trazabilidad del envío, por lo que no se puede saber si ha ocurrido una incidencia que afectará a la llegada.
• Los muelles de carga están congestionados y no tienen cabida para más.
• Ineficiencias en las operativas de carga y descarga.

Si tu empresa está experimentando alguno de estos problemas, un software de gestión de transporte como Eaship puede ser tu solución. ¿Qué conseguirás con él?

• Booking de muelles de carga: con Eaship podrás compartir tus horarios disponibles con tus transportistas y permitir que ellos mismo reserven las horas que mejor encajen con el vehículo que van a mandar.
• Acceso rápido a la información: Eaship te permite tener toda la información de los envíos centralizada en la plataforma, de tal forma que no tendrás que estar revisando cientos de correos o realizando largas llamadas telefónicas. Esto te permitirá tomar decisiones ágiles y basadas en datos.
• Control y gestión de incidencias: desde el panel de control de Eaship puedes supervisar el progreso de los envíos con un golpe de vista. También te permite tener una completa visión de las incidencias y asignar responsables para garantizar su resolución. Asimismo, puedes categorizar dichas incidencias para identificar patrones y mejorar procesos.
• Automatizar tareas manuales: con Eaship puede automatizar tareas recurrentes para centrar tus esfuerzos en lo realmente importante. Por ejemplo, puedes asignar envíos a transportistas en base a tus acuerdos, comunicar y solicitar transporte o crear órdenes de carga. En pocos clics tendrás el envío establecido.

Gestionar de manera inteligente tus muelles de carga ya es posible gracias a Eaship. ¿Te animas a probar nuestra plataforma?